La hipnosis médica es un modo de funcionamiento natural de nuestro cerebro, presente en nuestra vida cotidiana. Se manifiesta en esos momentos en los que estamos tan concentrados en una tarea, pensamiento o experiencia interior, que nos olvidamos de nuestro entorno.
En todos estos ejemplos, experimentamos un trance hipnótico, caracterizado por una distorsión agradable del tiempo y el espacio. Este estado se diferencia enormemente de la hipnosis de espectáculo y no implica estar dormidos o perder el control.
En hipnosis, parte de nuestro cerebro permanece en vigilancia con el entorno, permitiendo incluso realizar tareas automáticas. Gracias a los avances en neurociencia, hoy sabemos que al evocar imágenes bajo hipnosis, se activan áreas cerebrales como si realmente estuviéramos viendo, oyendo o sintiendo lo que imaginamos. Esto le confiere una gran fuerza como herramienta terapéutica.
Durante la hipnosis clínica, el hipnopsicólogo guía al paciente mediante palabras, imágenes y sugestiones para acceder a sus propios recursos interiores. Se trata de una hipnosis formal, dentro de un marco médico-científico, orientada al bienestar y la salud.
La hipnosis permite acceder de forma natural a recursos internos, restableciendo el equilibrio entre el mundo exterior y nuestro mundo interior. Lejos de antiguos mitos, hoy está reconocida y se aplica con éxito en áreas médicas y psicológicas para tratar enfermedades y mejorar la calidad de vida.
La hipnosis clínica se ha consolidado como una herramienta eficaz en el tratamiento de múltiples trastornos, tanto en el ámbito psicológico como médico.
Algunos de sus principales beneficios y aplicaciones son:
En el ámbito hospitalario, cada vez más profesionales sanitarios de diferentes especialidades (anestesistas, pediatras, médicos de familia, dentistas, comadronas…) incorporan la hipnosis como tratamiento complementario.
Los datos clínicos y estudios científicos avalan la eficacia de la hipnosis clínica. A continuación, algunos porcentajes de éxito en consulta (orientativos):
Nota: La hipnosis clínica suele aplicarse con mayor efectividad cuando se combina con técnicas cognitivo-conductuales dentro de un tratamiento integral.
La hipnosis médica ha demostrado ser una alternativa eficaz para el alivio del dolor, tanto físico como emocional. La analgesia hipnótica puede emplearse sola o combinada con otras técnicas, y resulta especialmente útil en personas con alta susceptibilidad hipnótica.
Si bien parte del efecto puede estar relacionado con la sugestión (placebo), la hipnosis produce beneficios superiores en pacientes con alta respuesta hipnótica y trabaja de un modo distinto al mero efecto placebo. La investigación ha demostrado que este efecto depende de la predisposición del paciente y de la calidad de la intervención.
Una sesión de hipnosis clínica empieza generando un clima de confianza entre paciente y terapeuta. Es fundamental la cercanía, el trato humano y la información clara sobre el proceso. Tras una evaluación exhaustiva de la historia clínica, se diseña un plan personalizado que puede coordinarse con otros profesionales (psiquiatra, médicos) si el caso lo requiere.
Durante la hipnosis, el paciente, sentado cómodamente, es guiado mediante un diálogo terapéutico y ejercicios de visualización. Se trabaja sobre los síntomas, emociones, pensamientos y se plantean ejercicios que invitan al cambio de perspectiva y al empoderamiento. El objetivo es desbloquear recursos internos y promover el bienestar.
Una mujer de 30 años, con antecedentes de anorexia y bulimia, relataba una obsesión por los alimentos azucarados como mecanismo de compensación ante dificultades laborales y de pareja. Mediante sesiones de hipnosis, ella visualizaba el efecto de los azúcares en su cuerpo y reestructuraba su relación con la comida. Al acabar el proceso, su percepción y sus hábitos alimentarios habían cambiado, logrando un equilibrio entre el control y el descontrol. La hipnosis la ayudó a encontrar un punto medio y a liberarse de la compulsión.
La hipnosis médica y clínica es una herramienta segura, eficaz y respaldada por la ciencia para mejorar una amplia variedad de trastornos y problemas de salud, así como para potenciar el bienestar emocional y la calidad de vida. Si quieres experimentar sus beneficios, es fundamental acudir a un profesional de la salud acreditado y especializado en hipnosis clínica.
Si deseas una valoración o iniciar un tratamiento de hipnosis médica, puedes ponerte en contacto conmigo. Juntos, encontraremos el camino a tu bienestar psicológico y emocional.